En el mes de julio me ofrecieron acompañar a un grupo de alumnos a Aspen Colorado. Fue algo que nunca se me había pasado por la mente ya que no hablo inglés. Explicando mis limitaciones con el idioma me puse al servicio del Comité de Ciudades Hermanas.
Lilian, Eve y Damasia organizadoras de este proyecto, nos presentaron a los padres y a Audrey la otra profesora que acompañaba al grupo.
En ese momento en mi mente y corazón comprendí el regalo que me habían dado y me propuse vivirlo sin ninguna expectativa, sin esperar nada, de esta forma viviría cada instante como un obsequio, sabiendo y asumiendo la responsabilidad que implica acompañar a un grupo de alumnos.
Comenzamos con los preparativos… nos juntamos con Audry con dos objetivos conocernos y organizar los encuentro con los chicos!
Sabíamos que el viaje sería del 21 de septiembre al 3 de octubre, con 13 alumnos de tres escuelas y que algunos de ellos no se conocían.
Una gran tranquilidad saber que con Audrey teníamos los mismos criterios, acordábamos, y pensé con alegría que iba a resultar muy placentero compartir esta experiencia.
Nos juntamos con los chicos en dos oportunidades hablamos y trabajamos la importancia de cuidarnos, respetarnos, acompañarnos y sobre todo tener la confianza para contar las cosas que nos podrían inquietar en esta aventura. Los alumnos tenían en claro cuál era el objetivo de este viaje, aspecto que facilitó los encuentros.
Llegó el día!!! Un viaje sin inconvenientes todo fluía con mucha alegría pensé …otro regalo!!!
Aspen!!!
Llegamos .. las familias nos recibieron que con mucho cariño nos agasajaron con comida y regalos, una hermosa bienvenida.
Aspen es una ciudad muy parecida tipográficamente a San Carlos de BariIoche, es organizada, segura, y limpia, según los aspeninos es una ciudad modelo de los Estados Unidos de América.
Todos los días nos encontrábamos con los chicos y un grupo de madres en el colegio público y de allí realizamos distintas actividades como, compartir clases con diferentes grupos y escuelas, hacer caminatas, ir a la pileta, visitar el centro comercial, entre otras cosas.
Al grupo de alumnos se los veía contentos, integrados, cada mañana cada uno contaba su experiencias vividas el día anterior.
Un día le preguntamos qué era lo que más le llamaba la atención de Aspen y dijeron que la familia, la gente !!! Con Audrey nos miramos con sorpresa sentimos una inmensa alegría…
Llego la despedida!!!
Una fiesta hermosa donde todos estábamos contentos del encuentro, los chicos compartieron la última tarde noche en la pileta con sus ̈hermanos ̈ , los adultos entre charlas, risa, y mucha alegría de habernos conocidos compartimos una linda cena…y pensé otro regalo.
Y… de vuelta a la Argentina!!!
Me voy a permitir compartir con ustedes un artículo que habla de los beneficios de hablar inglés que va ser el regalo que yo aporto, teniendo en cuenta mi limitación y viendo al grupo de alumnos que tan bien se comunicó….ojalá sirva…
Bea
Carta de María Sol Gomis (2 Año):
La experiencia que tuve en Aspen fue inolvidable, aparte de ser única. Me divertí mucho y pude conocer una cultura diferente, aprendí a hablar mejor en ingles y me lleve en el corazón a una familia hermosa. Si tuviera la oportunidad de volver a ir no lo pensaría y diría que si, no todos tienen la misma experiencia pero todos los que van la pasan bien, es imposible pasarla mal. Es un viaje que realmente vale la pena y lo voy a tener en mi memoria para toda la vida.